La labor del docente es muy importante, ya que de él depende en cierto modo el grado de implicación del alumno en su aprendizaje, afectando al desarrollo e interés que tenga el alumno en su formación académica. Los docentes se encargan de hacer florecer en parte a los alumnos como ciudadanos tanto profesionalmente como personalmente.
Hoy en día pienso que la sociedad
no valora lo suficiente el trabajo de los docentes. Cada vez se ponen más
trabas en el desarrollo de su trabajo,
limitando sus funciones, además de ponerse en duda sus formas de
trabajar. Es rara la vez que el docente no se siente presionado o intimidado en alguna ocasión por
los familiares de algún alumno en concreto. No debemos de olvidar que la
educación y el respeto están por encima de todo. Además hay que tener presente
que el docente se encarga de enseñar y
las familias de educar.
Por otro lado es fundamental que
las familias se impliquen en la educación de sus hijos y en el aprendizaje
académico. Las familias deben de ser informadas de la responsabilidad que
tienen con sus hijos.
Desde mi propia vivencia en el centro educativo, los alumnos que no encuentran un apoyo en sus padres, tienen más posibilidades de fracasar en el ámbito escolar. Tengo que destacar casos como por ejemplo, alumnos a los que les cuesta más y los padres se implican en su educación por lo que dichos alumnos evolucionan y conseguirán todo lo que se propongan, por el contrario, otros alumnos en los que sus padres no se implican en su educación, difícilmente evolucionan, retrocediendo sobre lo ya aprendido en algunos casos.
Bibliografía
Pablo Gutiérrez de Álamo. (5 de
Octubre de 2017). La importancia de ser docente. El diario de la
educación. Fundación periodisme plural Recuperado de https://eldiariodelaeducacion.com/2017/10/05/la-importancia-de-ser-docente/